Descripción
Era muy joven cuando leí por primera vez este libro que ahora vuelve a reeditarse. Sin embargo, aún con el paso de los años, no he olvidado algunas de las escenas que contiene. Como leemos en las primeras páginas, Spurgeon consideraba a Robert Cleaver Chapman como “el hombre más piadoso que jamás conocí”, lo cual es una inmejorable presentación. Indudablemente, la forma en la que Chapman servía al Señor en Barnstaple (Reino Unido) y su forma de vivir el evangelio sabiendo que continuamente estaba en su presencia independientemente de cuál fuese su actividad, incluso aunque se trataran de trabajos manuales, y su visión misionera, le convierten en un personaje sobre cuya vida merece la pena reflexionar.
Como bien menciona el autor, Frank Holmes, realizar esta biografía fue una tarea compleja porque aunque Chapman vivió una extensa vida de casi cien años, llena de experiencias para compartir, lo cierto es que él mismo destruyó intencionadamente la mayor parte de sus papeles. De ahí que sólo alguien empapado del ministerio de Chapman al tener tantos amigos en Barnstaple, podía escribir un relato así. Cuando surgió la oportunidad de traducir el relato por parte de LITERATURA BÍBLICA en los años 60, la traducción corrió a cargo de dos hombres excepcionales por su cultura, compromiso en la obra del Señor y carácter espiritual, Santos García y Juan Federico. Fue un trabajo extraordinario porque este proyecto se gestó cuando la censura de la “Oficina de Turismo e Información” debía reconocer que esta traducción narraba acontecimientos históricos con fidelidad, sin ser su meta la crítica de España. Finalmente, esta obra se publicó y tras agotarse se reedita por tres motivos mencionados por Ken Barrett en la introducción: “Primero, por el carácter del propio Chapman y la urgente necesidad de reconocer cómo nuestro Señor sigue formando autoridad espiritual en las personas por su Palabra y a través de la comunión íntima. Segundo, porque Chapman ejerció una influencia importante en el movimiento de las Asambleas de Hermanos, sin duda bendecido por Dios en la extensión del evangelio y en el necesario reenfoque sobre los principios y las prioridades novo-testamentarias de la Iglesia fiel y confesante. Tercero, por su vínculo personal con España con tres generaciones de obreros, y el ánimo que brindaba desde Barnstaple y por sus visitas a este país. Sigue siendo un referente de liderazgo espiritual en una Europa secularizada, sin Dios y sin esperanza, y que no tendría ninguna luz si no fuera por la fiel predicación del Evangelio”.
En relación a España, Chapman fue uno de los pioneros de las Asambleas de Hermanos, y hay indicios de dos visitas breves a España por parte de Chapman en 1828 y 1834, pero normalmente sólo se hace referencia a otras tres en 1838-39, 1863 y 1871, todo esto se llevó a cabo a pesar de la incomprensión de sus parientes y amigos que intentaron disuadirle a desistir como le ocurrió a otros misioneros, dada la situación político-religiosa del momento. Con todo, Chapman no sólo vino, sino que animó a muchos misioneros a acudir como fueron los Lawrence, tal y como se relata en otro de los valiosos libros publicados por el CEFB: “El Evangelio en España”. Si algo caracterizó a Chapman además de su amor por los que no conocían el evangelio fue que de una forma muy práctica, para él la palabra “hermano” no sólo era un término formal, sino que ayudó de muchas formas prácticas a un buen número de hermanos proveyendo para sus necesidades, como por ejemplo, el conocido Manuel Matamoros.
Esta edición cuenta no sólo con la biografía y una selección de dichos escogidos de Chapman que merece la pena considerar, sino que además incluye un reportaje fotográfico y una introducción histórica que no figuraba en la primera traducción a cargo de Ken Barrett, misionero afincado en España quien sirve al Señor junto a su esposa Alison en múltiples ministerios como por ejemplo el Archivo Histórico del Centro de Formación Bíblica de Madrid (CEFB) que promueve esta obra. En este caso, Ken ha contado con la colaboración de Marcos Gago, periodista y reconocido investigador de la historia de las Asambleas de Hermanos, y más particularmente de Galicia como puede leerse en su trabajo: “En los campos de Galicia”. También han contribuido la asociación Kalos, el Centro de Documentación Evangélica de Toral de los Guzmanes y Bryan Charles con el material fotográfico.
David Vergara